lunes, agosto 27, 2007

Nº:85 - Entrevista a William I. Robinsón

El Capitalismo global, segun el sociologo William Robinsón
"Los Estados de hoy responden mas a las exigencias del capital que a las demandas populares"

La irrupción y el desarrollo del capitalismo global es una interesante teoría explicativa sobre el cambio de época en el capitalismo mundial de finales del siglo XX y comienzos del XXI, expuesta en detalle por el sociólogo norteamericano William I. Robinson. Este cambio, según el autor, está dado por el surgimiento del Estado transnacional que en buena medida vino a remplazar la estructura económica del Estado-Nación a través de la globalización tanto de la producción como de los capitales transnacionales.

"Mientras muchos detractores de la globalización se enfocan en el comercio global y consecuentemente en el mercado, creo que el proceso de globalización está impulsado por la transnacionalización de la producción y los sistemas productivos y de propiedad del capital, que a su turno conducen a la aparición de una burguesía transnacionalizada asentada en la cúspide del orden global", sostiene este investigador y científico social, quien cuenta con un Ph.D en Sociología de la Universidad de Nuevo México y es autor de varios libros y ensayos.

Robinson es actualmente profesor en el Departamento de Sociología de la Universidad de California, en Santa Bárbara, donde dicta sus cátedras sobre procesos económicos, América Latina, el cambio social y la democracia. Entre sus publicaciones recientes se destacan: "Estudios críticos sobre la globalización", "Conflictos transnacionales: Centroamérica, globalización y cambio social" y "Una teoría sobre el capitalismo global: Producción, clases y Estado en un mundo transnacional".

A su pasó por Colombia, WWW.CRONICON.NET tuvo la oportunidad de dialogar con él para ahondar sobre las implicaciones y consecuencias del capital transnacional.

LA ECONOMÍA GLOBAL: UN NUEVO SISTEMA DE PRODUCCIÓN

- En su libro "Una teoría sobre el capitalismo global", usted señala que la globalización constituye una cambio de época. ¿Por qué?

- El capitalismo sigue siendo capitalismo en cuanto a sus propias leyes de desarrollo y acumulación pero fundamentalmente hay nuevos rasgos, procesos cambiantes, estructuras novedosas y por eso estamos ante una nueva etapa del capitalismo. Siempre el sistema capitalismo ha ido cambiando intensiva y extensivamente y podríamos decir que hay una periodización del capitalismo: la primera época mercantil que se inicia en 1492 con la conquista hasta aquella fecha simbólica de 1789. La segunda época la denominamos del capitalismo competitivo en la que se produce la revolución industrial, el nacimiento de la burguesía, su consolidación como clase y el aparición del Estado-Nación. A comienzos del siglo XX hay una tercera etapa y es cuando el capitalismo competitivo da lugar al capitalismo monopólico, yo lo denomino capitalismo corporativo y aquí tenemos a las grandes compañías nacionales que comienzan a internacionalizarse, a hacerse compañías multinacionales. En esta época se dan la primera y segunda guerras mundiales, las rivalidades imperialistas entre las grandes potencias. Pero en estas etapas todavía era el capitalismo del Estado-Nación. A finales del siglo XX y comienzos del XXI vemos que se configuran nuevos rasgos que dan lugar a una cuarta etapa del capitalismo cuyas características están dadas porque los principales capitales nacionales se han ido transnacionalizando, fusionándose con capitales de otros países, de tal manera que surge el verdadero capital transnacional, un capital que ya no se arraiga o se identifica con un solo país sino con el sistema global en su conjunto. Otro rasgo característico es el surgimiento de una nueva clase social que es la clase capitalista transnacional, esta es una fracción de clase que es la dueña de las grandes compañías multinacionales que operan alrededor del mundo sin base en ningún país. Opera como clase, desarrolla una conciencia de clase, se reúne una vez al año en Davos, y ha creado una serie de instituciones y foros para actuar como tal. Un tercer rasgo es la aparición de una nueva institucionalidad a nivel transnacional como la Organización Mundial del Comercio (OMC), la transformación de las diferentes agencias de Naciones Unidas a comienzos de la década de los 90; y el hecho de que entidades como el Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial cada vez más sincronizan su accionar, representando los intereses del capital transnacional, creando la infraestructura global y las regulaciones para la economía global.

- ¿Qué características tiene esta economía global?

- La economía global es un nuevo sistema de producción y de finanzas que es trasnacional, que jamás lo habíamos visto. De tal manera que surgen circuitos globales de acumulación y todos los países se han visto obligados por lo que ha pasado con los ajustes y el neoliberalismo a integrarse a esta nuevo sistema productivo y financiero del capitalismo global. De esta manera, hoy los Estados responden a las exigencias del capital y no pueden absorber las demandas populares, cumpliendo un rol más policíaco que político.

- ¿Qué relación hay entre neoliberalismo y capitalismo global?

- Neoliberalismo no equivale a capitalismo global, son dos cosas distintas. El capitalismo global es una nueva etapa histórica del sistema capitalista; el neoliberalismo en cambio, es un programa particular que ha servido desde la década de los 80 para abrir paso al capitalismo global mediante la reducción de las barreras comerciales a la expansión del capital. Pero perfectamente podríamos cambiar el modelo neoliberal y todavía tener el capitalismo global, al igual que podríamos tener un modelo capitalista de sustitución de importaciones, o un modelo capitalista competitivo, o keynesiano, o de mercado libre, o de Estado, hay muchos modelos, pero siempre hay capitalismo. En el caso del neoliberalismo hay que decir que está en crisis y ha acelerado las contradicciones de este capitalismo global. Como el capital se globaliza, sale del Estado-Nación, las clases sociales ya no pueden intervenir para exigirle al Estado que redistribuya la riqueza, los sindicatos tienen muchas más dificultades, se presenta entonces un desplome del nivel de vida de las masas populares. El neoliberalismo nunca genera una legitimidad entre las masas, pero éstas aún no tienen la suficiente fortaleza para enfrentarlo. No obstante, el neoliberalismo entra en crisis con la experiencia de Argentina durante los años 2001 y 2002, con lo cual se da el viraje en América Latina a través de la elección de gobiernos antineoliberales.

- ¿La crisis argentina marca una ruptura histórica en Latinoamérica?

- En la década de los años 90 se dan tres planteamientos en Latinoamérica: el primero denominado el Consenso de Buenos Aires que reúne a los partidos y sectores progresistas de América Latina y plantea que no se puede desafiar el capitalismo global sino que hay que buscar mecanismos para lograr una mejor redistribución, para lo cual se debe buscar una alianza de todas las fuerzas que puedan oponerse al neoliberalismo puro. La segunda posición señala que no se puede superar el capitalismo, así que se debe desatar el capitalismo global con un programa mucho más radical y por lo tanto la alianza tendría que ser con fuerzas anticapitalistas y procapitalistas pero antineoliberales. Y la tercera posición propendía por desafiar al capitalismo a través de la alianza entre las fuerzas anticapitalistas. En esos tres escenarios se deba la discusión: Jorge Castañeda defendía la primera posición; una configuración de movimientos políticos e intelectuales apoyaba la segunda y James Petras proclamaba la tercera.

- ¿Y qué ha pasado en Latinoamérica?

- Hay dos respuestas que se están dando en América Latina: una primera respuesta es la neokeynesiana que está representada por Kirchner en Argentina; Lula en Brasil; el Partido Socialista en Chile; Tabaré Vásquez en Uruguay; y sería la propuesta del Partido Revolucionario Democrático en México. Su propósito es buscar nuevos mecanismos para lograr una redistribución y un mayor control de ciertos recursos. La otra respuesta que está surgiendo y es la que representan Hugo Chávez en Venezuela, Rafael Correa en Ecuador, y Evo Morales en Bolivia, que gira entre un populismo radical y un Socialismo del siglo XXI.

- ¿Cómo analizar el proceso de Chávez en Venezuela?

- Creo que en las actuales condiciones del proceso político que lidera Chávez, el Estado Nación no ofrece una alternativa viable. El gobierno venezolano ha descubierto que su supervivencia, la supervivencia del proyecto popular de transformación en Venezuela, depende de un proyecto más amplio para toda Sudamérica y América Latina. Pero la idea de que podría haber en Venezuela una transformación popular del capitalismo global, sin que ese proyecto esté vinculado a las transformaciones continentales que se están dando en forma coordinada en toda América del Sur, es una idea que no se corresponde con la realidad.

- ¿Qué opinión le merece la postura del sociólogo norteamericano James Petras en el sentido de que la única salida que le queda al mundo es acabar con el capitalismo transnacional?

- Yo tengo muchas diferencias con Petras, pero cuando él señala que hay que acabar con el capitalismo estoy de acuerdo, porque primero, el capitalismo global a estas alturas no puede ofrecer ya ninguna solución a la mayoría de la humanidad; y segundo, el capitalismo global no es sostenible por muchas razones y va acabar con nuestra especie, por lo tanto, es necesario pasar a una clase de socialismo democrático. Además, Petras tiene razón cuando plantea que es necesario introducir una agenda anticapitalista, una agenda socialista, el ejemplo de ello es Venezuela y lo que están construyendo Correa en Ecuador y Morales en Bolivia. Ahora bien, mi diferencia con Petras radica en que él hace el análisis a partir del enfoque de la vigencia centrista del Estado-Nación, considerando que cada Estado tiene su propia economía nacional que se vincula con el sistema global y hay, por lo tanto, una interrelación de Estados-Nacion. El argumento mío, en cambio, es que hay procesos y estructuras transnacionales que van superando la posibilidad de interpretar el mundo como una interacción de los Estados-Nación. También afirma que es Estados Unidos el imperio que amenaza a América Latina, en contraste, yo considero que en cada país latinoamericano hay ciertas elites y ciertas capas medias que se han integrado al capitalismo global y que forman una base integral de esa economía global. Para poner un ejemplo, en Colombia quienes están detrás del Tratado de Libre Comercio no son solamente los Estados Unidos o el presidente Uribe, a quien califican de títere, sino que Uribe representa una configuración de fuerzas clasistas dentro de su país y de América Latina que apoyan dicho tratado porque están en juego sus intereses, sus capitales y sus formas de acumulación.

- Hablando de Colombia, usted ha señalado que el paramilitarismo que es un fenómeno criminal al servicio del Estado, constituye un elemento del capitalismo global. ¿Por qué?

- Claro, porque el paramilitarismo ha desplazado de sus tierras a millones de campesinos, afrodescendientes e indígenas colombianos. ¿Y que pasa con esa tierras? Simplemente esas tierras pasan a ser parte de la acumulación de capital transnacional, sirven para plantaciones de palma africana, de soya, de turismo trasnacional, es una acumulación primitiva. El mecanismo de la última etapa de acumulación primitiva de la globalización en Colombia es el paramilitarismo. En ese sentido, estas tierras van a estar en función de la economía global, de circuitos globales de acumulación. Los mecanismos que transforman y que siguen transformando al campo colombiano e insertando a Colombia dentro del mecanismo global son el Estado terrorista, la narcoburguesía y el paramilitarismo que han convertido a campesinos e indígenas en desempleados y en migrantes internos y transnacionales, al tiempo que generan proyectos a partir de la palma africana y la soya para agrocombustibles. Además, la coca es el producto que vincula a Colombia con la economía mundial y tiene un peso específico en su producto interno bruto.

- ¿El tratado de libre comercio que aspira a suscribir el gobierno colombiano con Estados Unidos es un instrumento que servirá para lavar narcofortunas?

- Exactamente, esos dineros de la narcoburguesía colombiana terminarán convirtiéndose en capital financiero legal, el cual se constituye en un fracción hegemónica del capital transnacional. En otras palabras, la transnacionalización financiera sirve para blanquear narcodólares. Quiere decir que una vez esas fortunas del narcotráfico convertidas en dinero lícito, se constituyen en la cima de lo que es el capitalismo global en Colombia, el cual a su vez, está sustentado en un proyecto medio fascista y paramilitar impulsado para crear las condiciones internas que permiten a este país globalizarse. Y el instrumento del capitalismo en Colombia es el uribismo.

- ¿Si el capital transnacional es tan fuerte y está tan consolidado tendríamos que darle la razón a Fukuyama en el sentido de que con la caída del socialismo soviético lo que se produjo fue el fin de la historia?

- No, de ninguna manera, dije que el capitalismo se ha transnacionalizado pro no es tan fuerte, al contrario el capitalismo global está en crisis y yo en mi libro hablo de cuatro dimensiones de esa crisis: la primera, la crisis de reproducción social o de polarización en el sentido de que el capitalismo tiene la tendencia de generar mucha riqueza, pero polariza esa riqueza y no hay posibilidad de redistribuirla. La segunda tiene que ver con la sobreacumulación, es decir hay mucha producción pero no puede ser absorbida por el mercado global. La tercera crisis es la del colapso del mercado crediticio e hipotecario. Por eso Bush comienza a militarizar la economía global y de ahí la intervención en Irak tiene fines políticos y petroleros, pero a nivel subyacente representa el keynesianismo militar. Y la cuarta crisis es la de legitimidad, en el caso de América Latina, el capitalismo global está deslegitimizado. El sistema, entonces, está débil, no se puede reproducir, por eso creo que estamos entrando en un momento de cambios bruscos e impredecibles, en el que la intervención humana puede lograr muchas cosas, así como puede lograr una fascismo puede lograr un socialismo.

- ¿El capitalismo global ha generado una nueva clase de proletariado?

- Ha surgido una clase trabajadora global dado que la clase trabajadora de un país tiene una relación orgánica con las otras naciones porque están fabricando el mismo producto. La fabricación de un carro, por ejemplo, pasa por treinta o cuarenta países. Si obreros de treinta o cuarenta países ponen su mano de obra para elaborar un solo producto, ello quiere decir que es una clase transnacional pero a diferencia de la burguesía transnacional es una clase en sí pero no por sí porque no tiene conciencia de clase transnacional, ni forma de organización transnacional o foros como los tiene la burguesía y no tiene la misma subjetividad que la clase capitalista transnacional, y no la tiene porque existen todavía fronteras nacionales, y en consecuencia la clase trabajadora está jurídica, política e institucionalmente bajo los parámetros del Estado-Nación, mientras orgánicamente existe en la transnacionalidad.

- ¿Por qué usted sostiene que en América Latina se da una poliarquía?

- En América Latina hemos tenido todas las dictaduras por cuanto éstas fueron los mecanismos internacionales de control social. Los Estados Unidos y las oligarquías locales las utilizaban para mantener o reproducir el sistema y eso se dio en las décadas de los 60, 70 y hasta los 80. ¿Pero qué paso? Estos regímenes militares mostraron ser vulnerables a sublevaciones y revoluciones porque no eran mecanismos viables de control social transnacional. La revolución sandinista conduce a un cambio total del pensamiento de la elite trasnacional. Estados Unidos concluye de que si continúa apoyando a los Somoza, a los militares argentinos, a Pinochet, van a presentarse revoluciones por doquier y se perderá todo. Entonces el gobierno estadounidense quita el apoyo a estas dictaduras y en su lugar va a facilitar la llegada al poder de gobiernos civiles neoliberales para evitar que las bases populares con proyectos opuestos al capitalismo global lleguen a sustituir a los regímenes de facto, con lo cual Estados Unidos desarrolla la política llamada de promoción de la democracia, y de esta manera se pasa de la dominación coercitiva a la dominación consensuada, esto es una poliarquía que se caracteriza por una dictadura socioeconómica y una democracia política. Eso es la fórmula de poliarquía que quiere decir literalmente democracia entre las elites, teniendo en cuenta que la concentración de poder socioeconómico se traduce en influencia política.
Generalmente en América Latina el capital transnacional ejerce el poder estructural sobre los Estados. El mejor ejemplo es el caso de Lula en Brasil, que cuando ya era imparable su victoria y ante la salida abrupta de capitales por temor a la llegada de un gobierno socialista, no tuvo otra alternativa que reunirse con el FMI y suscribir un documento en el que se comprometía a respetar los acuerdos con este organismo multilateral y a proteger a los inversionistas transnacionales. Eso es la poliarquía en acción, o sea, el poder económico tiene un poder estructural para evitar que la poliarquía resulte en cambios radicales que desafíen al sistema. Pero ya las contradicciones en América Latina se han agravado demasiado y la poliarquía no puede contener la resistencia y presiones populares, eso es lo que ocurrió en Venezuela, en Bolivia y Ecuador. En Colombia, por el contrario, ni siquiera se ha dado la poliarquía por cuanto siempre ha sido un sistema autoritario, militarizado, dictatorial prácticamente, con la connotación de que hay elecciones.

(*) Entrevista realizada por Fernando Arellano Ortiz
Fuente: Cronicon

miércoles, agosto 15, 2007

Nº:84 - ¿Globalización polarizada o sociedad humanizada?

¿Globalización polarizada o sociedad humanizada?
Jose Vidal-Beneyto (*)

En un debate en Ciencia Social es importante señalar el locus de la enunciación, esto es, el lugar ideológico desde dónde se habla. Yo me englobaría en un colectivo simbólico que denominaríamos progresismo, que tendría dos características fundamentales: la constatación de que las cosas en nuestro mundo no van bien y, en segundo lugar, la seguridad de que éstas pueden mejorar y que, precisamente, queremos que así sea. Los grandes árboles axiológicos de este colectivo serían la Justicia Social y la libertad con igualdad.
Si tuviéramos que responder ahora mismo a la pregunta que encabeza esta conferencia, la respuesta no puede ser más contundente: En absoluto. Debemos entender, de hecho, que la globalización neoliberal es un resultado, no una fatalidad.
Hay dos determinaciones técnicas que caracterizan este proceso actual: las informáticas y las comunicacionales, ninguna de las cuales cierran un conjunto intelectivo coherente, sino que dependen de una voluntad político-económica.
También encontramos tres grandes contradicciones en esta época actual. La primera es la naturalización de la guerra. De hecho, basta con comprobar que el concepto conflicto ha desaparecido de la literatura sociológica. La segunda es el aumento casi incontrolado de la riqueza (en términos economicistas), que es coetáneo con un empobrecimiento de las variables humanas. Y la tercera es la homogeneización de valores, comportamientos y prácticas simultáneas con la reivindicación de la diversidad.
Hay que diferenciar los conceptos de mundialización y globalización, entendiendo que el primero está caracterizado por la discontinuidad y la multiplicidad temática de los ámbitos a los que se aplica, mientras que el segundo es un proceso continuo y fundamentalmente centrado en el ámbito financiero. Coincido con Amartya Sen en el tratamiento matriz que se le da a la economía sobre el mundo, pues es evidente que no se puede hacer nada importante sin conocimientos económicos, y con los análisis de Stiglitz después de su salida del BM y del FMI, puesto que la realidad social se debe pensar desde la economía.
Hay un hecho actual tristísimo: la izquierda radical no tiene en cuenta a la economía. Y además es urgentísimo repensar el actor histórico, algo que ya están haciendo algunos pensadores de izquierdas con los conceptos de “pueblo”, “multitud”, “demanda”, etc. Hay que buscar la conceptualización del sujeto histórico, y es completamente imposible resucitar al proletariado. Hoy estamos en un grave corte epistemológico, y existe un trabajo teórico imperativo en este sentido.
Es evidente que estamos en una realidad en la que bienes y servicios han sido devorados por sus expresiones numéricas con la economía financiera y ayudada por la economía inmaterial.
Hay que tener en cuenta también que la realidad mediática no presenta la realidad en sí misma, sino que la produce. Y sin poder social no se puede hacer nada. Por esto mismo en la teoría hay que ser radicales, pero en la acción (sin poder) hay que “tragar”.
Hay que cargarse la categoría de “gobernanza”, que es estrictamente económica, promocionada por el BM y el FMI y que espera que se produzca convergencia a través de la mano invisible. Pura utopía.
Para mi no puede existir un estado mundial en el próximo siglo. Sin embargo, hay que lanzar el término de gobernación global, y aunque tiene que haber alguien que mande, no nos podemos apoyar en las estructuras de gobierno actuales. Yo para esto veo dos vías:
La primera, una macrointegración política regional por grandes áreas transversales. El caso evidente es el de América Latina: es necesario que se integre para hacer frente a las continuas adversidades globales en las que se encuentra. Hay que crear los cimientos de un senado democrático de áreas. Estamos viendo, no obstante, las tremendas dificultades que existen para esta tarea. No sabemos cómo hacerlo.
La segunda, un progreso sostenible realizado sectorialmente por áreas. Un ejemplo sería la necesaria integración energética en América Latina. Es una tarea dificilísima. Habría que convencer a los poderes políticos de América Latina para que se asociaran con las grandes empresas energéticas. Sin embargo, Evo Morales lo ha intentado recientemente y se ha demostrado que los cerrados son los empresarios.
Tenemos que imaginar también la integración política y socioeconómica de las fuerzas sindicales, fundamentales para el avance social en esta época. Cierto es que resulta hartamente complicado, pero igualmente cierto es afirmar que todo lo importante es difícil.
Yo desde aquí os invito a asociaros a estas luchas, ilusiones, esperanzas, reflexiones


(*) Trascripcion realizada por Alberto Garzon sobre una ponencia del autor el 30 Julio 2007 es San Lorenzo de El Escorial dentro de los cursos de verano de la UCM.

Nº:83 - Los elementos anti-sistemicos

Los elementos anti-sistémicos
Gustavo Castro Soto

Muchas expresiones se revelan frente al Sistema Capitalista que hoy nos domina y en contra sus consecuencias destructivas. Pero también otros mundos en diversas partes de nuestro planeta se han logrado mantener por décadas o siglos, resistiendo, a veces silenciosos, a veces moribundos, a veces sobreviviendo, a veces resucitando. Necesitamos rescatar estos otros mundos que dan esperanzas de que se pueda vivir sin el capitalismo.
La situación de pobreza, miseria, hambre, migración, feminicidios, guerras, cambio climático y destrucción medioambiental, entre otros indicadores graves que se van agudizando y que vivimos en nuestro planeta, fruto del sistema que actualmente impera, nos hace pensar que otros mundos son posibles. Que deben existir otras alternativas donde todos los mundos quepan, donde la humanidad pueda vivir en plenitud, dignidad y felicidad.
Muchas expresiones se revelan frente al Sistema Capitalista que hoy nos domina y en contra sus consecuencias destructivas. Pero también otros mundos en diversas partes de nuestro planeta se han logrado mantener por décadas o siglos, resistiendo, a veces silenciosos, a veces moribundos, a veces sobreviviendo, a veces resucitando. Necesitamos rescatar estos otros mundos que dan esperanzas de que se pueda vivir sin el capitalismo. Pero también necesitamos rescatar las diversas expresiones que se revelan contra este sistema y que quieren asomar otros mundos posibles y alternativos.
Pero, ¿qué significa que algo o alguien sea anti sistémico? Para ello debemos descubrir y ser concientes de lo que es el Sistema Capitalista. Y luego sabremos quién es anti sistémico, qué es anti sistémico, quién genera una experiencia anti sistémica.
¿Qué es el Capitalismo? Es un sistema político, social, militar y económico donde predomina la propiedad privada y el capital como elemento de producción y generador de riqueza. Entre sus elementos teóricos está el interés propio y la libertad de las empresas (a buscar la mayor acumulación del capital), del trabajador (a buscar el mayor salario) y del consumidor (a buscar el mejor precio). La competencia se da entre las ofertas, las demandas y entre ambos que en el mercado regula los precios de los bienes y servicios. El capitalismo tiene contradicciones inherentes que provocan crisis cíclicas. Durante la historia ha tenido diversos modelos o formas de estar previos a procesos de transición modélica. Su lógica intrínseca de acumulación del capital lo lleva a su propia destrucción. Lejos de agotar el tema, podemos hacer un breve recuento de los modos o modelos que ha tenido este sistema.
Modelo Liberal (1840-1945) Resaltó la libertad individual, de empresa, de comercio, de decidir qué y cómo producir, de competencia y el derecho la propiedad privada garantizada por el Estado. El capitalismo industrial se impulsó con el invento de la máquina y su incorporación a la producción. El liberalismo rechazó el mercantilismo (el Estado controlador del quehacer económico de una nación) y que el Estado no impusiera límites a la forma y cantidad de obtener ganancias sino que generara condiciones (infraestructura) que permitan a los empresarios privados obtener mayores ganancias. La economía estaría regida por una ‘mano invisible’ donde la libre competencia y el movimiento de la oferta y la demanda regularían la economía. El liberalismo significó mayor explotación para los trabajadores. Su antítesis: el marxismo. Este modelo entra en crisis con la I y II Guerra Mundial (1914-1945).
Modelo Estado de Bienestar (1945-1970) Se justifica luego de la II Guerra Mundial. El Estado tendría que salvar la economía y generar bienestar en la población. Su agenda y sustento ideológico: la Declaración Universal de los Derechos Humanos. Cada país debía sustituir las importaciones ante la debacle de la economía mundial. Bajo las premisas de Keynes (1883-1946) surge en Bretton Woods el Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial (BM) para fortalecer el papel del estado en las economías nacionales. EE.UU. institucionaliza su hegemonía económica, política, militar y comercial. La Deuda Externa de los países pobres creció hasta que su crisis generó otra transición en la década de los 70.
Modelo Neoliberal (1970-2000) Una vez construido el aparato del Estado, sus economías e infraestructura, y bajo la presión de la deuda externa generada por las Instituciones Financieras internacionales (IFI’s) hacia los países pobres y en vías de desarrollo, el gran capital transnacional se lanza por el control de la economía. El Estado debe reducirse y abrirse nuevamente al liberalismo económico que fortalece la acumulación endógena del capitalismo con pobres cada vez más pobres y pocos ricos cada vez más ricos. El Estado interviene para incrementar la inversión y la demanda evitando las crisis cíclicas. Sólo se encargaría del ordenamiento jurídico que garantice ciertas libertades civiles, el control de la seguridad interna por medio de las fuerzas armadas en conjunto con la policía, la implantación de políticas indispensables para el funcionamiento de los mercados y el respeto de la propiedad privada. En la década de los ’90 entra en crisis para dar pie al siguiente modelo.
Modelo Corporación-Nación (2000-?) La mercantilización de todo cuanto existe en el planeta bajo la propiedad privada por parte de las grandes Corporaciones Trasnacionales se empieza a cohesionar a partir del Siglo XXI. Entre las características están: monopolización; adquisición y fusión entre sectores; cuentan con sus propias políticas laborales, salariales y de salud por encima de los gobiernos nacionales; mantienen relaciones diplomáticas con gobiernos; tienen a sus directivos en las estructuras del estado que velan por sus intereses; desarrollan sus propios valores, identidad, cultura, clubes, asociaciones familiares, símbolos e himnos que transmiten sus formas de pensar y vivir. Mueven sus capitales, insumos, técnicos y especialistas sin obstáculos en las fronteras. Cuentan con su propia seguridad, policía privada, infraestructura, plantas de energía eléctrica y territorio controlado. Elaboran las reglas comerciales en los TLC y conforman sus propios tribunales internacionales para defender sus intereses por encima de los intereses de los países. Cuentan con más presupuesto que naciones del planeta y garantizan un seguro a sus inversiones. Han plagiado el lenguaje de los derechos humanos para incorporarlos en la defensa de sus intereses. Al control de sus mercancías por otros gobiernos le llaman discriminación y al bloqueo de las del sur “protección de sus intereses”; a los subsidios a otros le llaman “competencia desleal” mientras a ellas se les aumentan; al impedimento de inversiones ecológicamente dañinas le llaman violación a la “libertad de inversión”. Se están adueñando de los recursos estratégicos de otros países como el petróleo y otros recursos mineros, el agua, el gas, la madera, biodiversidad y el material genético, el oxígeno, el mar, el espacio aéreo y la tierra. Para ellas el papel de los gobiernos es velar por sus intereses.
El Circuito. El Sistema Capitalista implementa el circuito que acelera la acumulación del capital en grandes monopolios privados. Tiene 7 Elementos: 1) Sujeto Principal (Corporaciones Trasnacionales y el gran Capital Financiero) quien se beneficia y a quien va dirigida la acumulación de la riqueza. 2) Aliados principales que son los gobiernos más poderosos (G-7) quienes a su vez utilizan un 3) Instrumento fundamental (IFI’s) para generar un 4) Mecanismo de control y dependencia (Deuda Externa) que obligue a los países pobres a implementar 5) Políticas (Políticas de Ajuste Estructural PAE) que garanticen tal acumulación. Este proceso se da en torno a diversos 6) Escenarios de imposición que legalizan dicha explotación bajo una 7) Correlación de Fuerzas favorable (OMC, Foro Económico de Davos, TLC’s, ALCA, APEC, PPP, IIRSA, etc.). Este proyecto económico va acompañado de una estructura militar que lo garantice ante la evidente falta de consenso mundial.
La crisis del capitalismo.
La crisis mundial del capitalismo se agudiza al iniciar el Siglo XXI y se prepara el mundo a transitar hacia otro sistema mundial. Los indicadores de esta crisis son económicos, políticos, sociales y medioambientales: crisis de las supuestas democracias al servicio del gran capital trasnacional; estancamiento económico y estanflación; agudización y ampliación de la pobreza, el hambre y las muertes; acumulación de la riqueza en pocas manos; aumento de las movilizaciones de protestas mundiales y represión; impacto medioambiental con este sistema que hace insustentable la vida planetaria.
El Sistema Capitalista tuvo un principio y tendrá un fin. El principio del ‘movimiento’ invade no sólo la vida biológica sino política y social lo que impide que nada se mantenga estático sino que la vida fluya. Esto significa que no hemos llegado al fin de la historia ni que un sistema o modelo del sistema definitivo y perenne.
Entre los elementos claves inherentes, intrínsecos y sin los cuales el sistema capitalista no podría funcionar, encontramos:
1) Competencia. Cultura, discurso y práctica que alimenta el encono y la frustración; el ganador y el perdedor. Esta “selección natural capitalista” provoca que unos cuantos ganadores sean los premiados por los beneficios del sistema.
2) Acumulación de capital. El sistema capitalista genera sus propios patrones de acumulación así como una estructura que garantice este proceso. Bancos, leyes, intereses, apropiación de excedentes, etc., propician esta acumulación.
3) Homogenización. Para el capitalismo es necesario que los patrones de acumulación estén cimentados en reglas, normas y estandarización política, económica y cultural que favorezca y facilite la acumulación.
4) Relación patrón-obrero. Un solo dueño y trabajadores que no son dueños de los medios para producir sino sólo de su mano de obra.
5) Patriarcal. El capitalismo no puede subsistir sin la relación de dominio de género, del hombre sobre la mujer explotada por medio de la feminización del capital que garantice la acumulación.
6) Especulación. La acumulación del capital se finca en la especulación más que en producir lo que la vida digna necesita para ser feliz.
7) Antidemocracia. El capitalismo responde a la lucha de intereses de unos cuantos que se van imponiendo sobre los intereses de las mayorías.
8) Endeuda. Como principio básico de la acumulación y la dependencia, el capitalismo es intrínsecamente endeudante.
9) Empobrecimiento. La competencia genera perdedores que no tienen acceso al capital y cuya tendencia es al incremento de la acumulación en pocas manos y la generación de grandes masas de perdedores.
10) Racismo. El capitalismo es intrínsecamente racista que busca el poder de los privilegios de unos sobre otros.
11) Ecocidio. El capitalismo conlleva a la destrucción del medio ambiente por el consumismo desmedido de materia prima hacia la apropiación y acumulación de la riqueza.
12) Monopolio. Consecuencia ingobernable de la competencia salvaje y de la eliminación del adversario económico.
13) Explotación. No hay acumulación del capital sin la explotación sin distribución de los beneficios del supuesto desarrollo entre ricos y pobres; norte y sur; norte global y sur global.
14) Consumismo. Predomina el consumo por el consumo en una carrera sin fin y sin medir las necesidades reales. El consumo desmedido de lo que se produce independientemente de su necesidad genera la acumulación de la riqueza.
15) Privado. La apropiación del capital financiero, humano, social, político y medioambiental, se cimienta sobre la propiedad privada frente a los público y social.
16) Dependencia. La acumulación del capital se finca sobre la dependencia de unos sobre otros en términos políticos, sociales, culturales, económicos y medioambientales. Estos dos polos que no pueden vivir uno sin el otro, su tendencia es a ir aumentando la distancia entre ellos.
17) Guerra. La imposición bélica del sistema es una modalidad inherente ya que siempre se encontrará con expresiones de inconformidad y falta de consenso durante el proceso de acumulación.
Elementos anti sistémicos de otros mundos.
Cuando hablamos de una experiencia anti sistémica nos referimos al discurso y práctica unidos en un individuo o colectivo social con características distintas o diametralmente opuestas a las que alimenta al sistema capitalista.
Las expresiones y experiencias anti sistémicas siempre han existido. Unas con mayor o menor impacto, con mayor o menor presencia social, con mayor tiempo o menor de duración histórica. Sin embargo, ellas no lograron conformar un sistema hegemónico que globalice las reglas de vida de toda la humanidad, como lo ha hecho el sistema capitalista porque no son su esencia sino la diversidad. Curiosamente otros mundos subsistentes no capitalistas se encuentran entre diversas culturas indígenas del mundo, y las alternativas antisistémicas emergentes se dan por lo general en las zonas rurales o entre la población excluida de los supuestos beneficios del sistema dominante actual. Los que reciben algún beneficio cuidan que ese interés se mantenga, se perpetúe y mejore, por lo que es difícil encontrar expresiones anti sistémicas entre este sector de la población, sino más bien expresiones reformistas o de argumentos de “humanización” del capitalismo, de capital humano, etc.
Otros mundos no capitalistas subsistentes y las alternativas anti sistémicas emergentes tendrán que experimentar varias de estas características. Mientras más características experimenten más antisistémica será y por tanto más dibuja una alternativa al capitalismo:
1) Participación. Contraria a la competencia capitalista la población participa de manera activa y creativa para construir su mundo sin el detrimento de que otros queden rezagados en el camino.
2) Distribución. Contraria a la acumulación. Este mundo reparte lo que sobra, los excedentes. Nadie acumula y el valor de compartir sobresale y se contrapone al valor del acumular. El rico no tiene cabida en este sistema-mundo. Los bienes alcanzan para todos: agua, tierra, alimentos, etc.
3) Diversidad. Contrario a la homogeneización la diversidad complementa y enriquece; la diversidad biológica y cultural alimenta los mundos; la diversidad une y no separa.
4) Colectividad. Contrario a la relación dueño y desposeído, el proyecto mundo es de la colectividad. No hay patrón. Hay iguales.
5) Perspectiva de género. Contrario al sistema patriarcal, es una visión científica, analítica y política sobre las mujeres y los hombres. Elimina las causas de la opresión de género (desigualdad, la injusticia y la jerarquización de las personas basada en el género). Promueve la igualdad entre los géneros a través de la equidad, el adelanto y el bienestar de las mujeres; contribuye a construir una sociedad en donde las mujeres y los hombres tengan el mismo valor, la igualdad de derechos y oportunidades para acceder a los recursos económicos y a la representación política y social en los ámbitos de toma de decisiones.
6) Necesidades. A diferencia de la especulación, las necesidades reales marcan la producción y reproducción de la vida.
7) Democracia. Sin totalitarismos, imposiciones o decretos para imponer voluntades de pocos, la participación informada y activa construye futuro y dignidad.
8) Solidaridad. No hay deudas que pagar, hay solidaridad que expresar.
9) Para todos todo. A diferencia del empobrecimiento de la mayoría y enriquecimiento de muchos, la riqueza material, cultural y de cualquier tipo alcanza para todos y todas; es de todos y todas.
10) Igualdad. A diferencia del racismo y los privilegios que genera, se expresa y se vive las relaciones de igualdad en derechos pero también en obligaciones colectivas.
11) Ecológico. Contrario al ecocidio, respeta la naturaleza y vive en armonía con ella.Hace uso razonable y sustentable.
12) Soberanía. Contrario al control monopólico sobre los bienes, la capacidad de definir por sí mismo el rumbo y el camino que se quiere tomar para vivir en plenitud.
13) Equidad. A diferencia de la explotación, las relaciones ni el bienestar de unos es a costa del sufrimiento, el hambre y la pobreza de otros.
14) Justeza. Sin necesidad de generar necesidades artificiales que consuman desproporcionadamente el sistema, se usa lo que se necesita con justeza.
15) Público. No convierte todo lo que ve y encuentra en propiedad privada, sino que garantiza el beneficio de todos y todas.
16) Autonomía. Sin dependencia parasitaria sino unidad en la diversidad de visiones y modos propios de autogestión y en libertad.
17) Paz. Contraria a la guerra que alimenta la vida y la economía, es la diversidad, la autonomía, la soberanía como sinónimos de paz, que no se entiende como la mera ausencia de balas o conflictos armados o la mera pacificación mientras sigue existiendo el hambre y la violencia institucionalizada, sino la paz con justicia, equidad y felicidad para todos y todas.
18) Nuevo lenguaje. Una nueva forma de llamarle a las cosas en el nuevo sistemamundo que no repita o solo reformule la conceptualización capitalista.
19) Visión política. Clara conciencia de querer vivir y expresar otros mundos diferentes al capitalismo.
20) Derechos Humanos. Donde toda persona humana, su felicidad y su plenitud, sea el objetivo central del proyecto político. No como una dádiva o regalo, sino como los elementos esenciales para poder vivir esa plenitud. No como un mero derecho, sino también como una obligación que liga con la sociedad.
La falta de total coherencia en la aplicación de estas características no invalida la experiencia anti sistémica. Estamos en el entendido de que es un proceso la construcción de alternativas para que otros mundos sean posibles. Por ello no se puede vivir una mutación genética sociopolítica de manera inmediata, espontánea y radicalmente distinta al sistema hegemónico capitalista, sino como parte de un desprendimiento de la vieja piel para cubrirse de otra alternativa. Esta transición implica por tanto incoherencias, contradicciones, pero con una direccionalidad por medio del desprendimiento para dar origen y parir otros mundos.

domingo, agosto 12, 2007

Nº:82 - Los paraisos fiscales (Naba)

Los paraísos fiscales
René Naba

El “asunto Clearstream” en Francia, es decir, el escándalo político de las falsas listas de beneficiarios de comisiones ocultas vinculadas a transacciones internacionales, ha llevado de nuevo al centro de la actualidad el problema de los paraísos fiscales y los oscuros derroteros del dinero ilícito.
Con el telón de fondo de la rivalidad entre el Primer Ministro, Dominique de Villepin, y su ministro del Interior, Nicolas Sarkozy, para el liderazgo de la derecha francesa en la perspectiva de la campaña presidencial de 2007, el asunto Clearstream destapó las costumbres de la clase política francesa. Pero más allá de su aspecto francés, Clearstream extrae su nombre de la Cámara de compensación interbancaria de Luxemburgo acusada, con razón o sin ella, de ser una de las mayores empresas del mundo del blanqueo de dinero.
Según el Fondo Monetario Internacional, citado por el Diario Le Monde con fecha 23 de mayo de 2006, de 700 mil millones a 1,75 billones de euros circularían así entre los bancos, paraísos fiscales y centros financieros a pesar del endurecimiento de las leyes y el aumento de los controles. Es decir, la importancia de las cantidades que circulan y lo que supone en sí misma esa circulación.
Paraísos fiscales, zonas offshore (1), flujos monetarios, capitales errantes y presupuestos aberrantes. Estos términos inocentes evocan, en principio, la lenidad de la vida en una sociedad que se caracteriza por la abundancia financiera, la flexibilidad económica y la evasión fiscal. En realidad es la cara odiosa de la globalización, nuevo dogma de la libre empresa con su retahíla de desempleo, exclusión o corrupción; en una palabra, todos los ingredientes que gangrenan la vida política, minan los fundamentos de las grandes y pequeñas potencias y hacen correr el riesgo de corrupción a las grandes y viejas democracias.
El nuevo orden internacional tan celebrado desde el hundimiento del bloque comunista, es decir, desde la derrota del mundo bipolar a principios de los años 90, ha creado en contrapartida un sistema planetario articulado en torno a la criminalidad transnacional. Los comentaristas occidentales durante mucho tiempo se han mostrado discretos sobre este asunto, más prestos a denunciar el peligro islamista o el peligro amarillo, después de haber denunciado incansablemente el peligro rojo.
Pero si es sano denunciar los peligros exteriores, sería igualmente salubre denunciar también los propios peligros interiores: Tráfico de drogas y armas, prostitución, juego clandestino o extorsión constituyen las principales fuentes de capitales ilícitos; y esos distintos tráficos a veces tolerados, cuando no fomentados, por los estados, generan anualmente 1,5 billones de dólares, lo que representa el presupuesto de los 20 países de la Liga Árabe, de los que un tercio -500.000 millones de dólares- procedería solamente de la droga.
Un profesor universitario británico, Ronan Palan, jefe del departamento internacional de la Universidad de Sussex y autor de la obra “The Off-Shore World” (Cornell Press University, 2003) mantiene que los paraísos fiscales están implicados en todos los escándalos, ya que disponen de la facultad de “legalizar” el dinero procedente de actividades ilegales en la medida en que la vigilancia de los capitales que transitan por las zonas offshore es muy difícil.
La explosión del número de paraísos fiscales aguzó la competencia hasta el punto de que incluso la City de Londres, a pesar de su reconocido rigor, no se ha librado de manipulaciones dudosas. Primer centro financiero europeo, Londres cuenta con cerca de 800 bancos. Las autoridades financieras, en particular el Financial Service Authority (FSA) tuvieron que congelar cuentas bancarias por un total de un 1.000 millones de dólares robados en la caja del banco central de Kenia bajo la presidencia de Daniel Arap Moi (1978-2002), así como las cuentas secretas del dictador chileno Augusto Pinochet.
Para desmarcarse, los paraísos fiscales pretenden especializarse ofreciendo una gama de servicios. Por ejemplo, Guernsey (unas islas británicas) se lanzó al mundo de los seguros, Costa Rica a los casinos en la Red o las Bermudas al comercio online. Los partidarios de la economía liberal justifican su existencia por el hecho de que su presencia obliga a los centros financieros tradicionales a no dormirse en los laureles y señalan que conviene distinguir entre la evasión fiscal -un delito- y la optimización fiscal, que constituye a sus ojos un procedimiento legal destinado a rebajar los impuestos.

1) El origen está en la mafia

Curiosamente el origen de la proliferación de los paraísos fiscales se encuentra en la mafia.
La mafia funciona a una sola escala, la del planeta. La mafia de la droga se extiende por todas partes: China, Japón, Estados Unidos, Sudamérica, zona Caribe-Pacífico, Rusia y Europa del Este, sin hablar del Sudeste asiático, Oriente Medio y África. Para adaptarse a la globalización de la economía, las organizaciones mafiosas han creado redes internacionales apoyadas por las tecnologías más modernas (Internet, teléfono móvil) que escapan a cualquier interceptación.
Según un estudio del FBI estadounidense, el cártel colombiano de la droga habría realizado en 1995 un volumen de negocios estimado en 67.000 millones de dólares, o sea más del doble del presupuesto de la Interpol (30.000 millones de dólares), que emplea a varios centenares de agentes. Se contrata a los mejores expertos en informática para hacer prosperar el negocio del blanqueo y las grandes confederaciones mafiosas (americana, siciliana, turca, rusa, yakuza japonesa y tríada china) se habrían constituido en una multinacional que compartiría países y productos, servicios y mercados.
A semejanza de la droga, el dinero sucio procedente del tráfico ilegal pasa a ser para los bancos e instituciones financieras que se prestan a operaciones de blanqueo una adicción que tiene los mismos efectos que los estupefacientes sobre los individuos.
A través de un circuito complejo y arriesgado, el dinero negro transita por una multitud de sociedades pantalla esparcidas a lo largo de los paraísos fiscales del planeta antes de rehabilitarse en los respetables bancos de los grandes centros financieros internacionales. Su detección es difícil. El único verdadero detector, a escala planetaria, es la balanza mundial de pagos.
Normalmente en los intercambios mundiales, cuando un país es deficitario, otro se vuelve excedentario, pero la inyección masiva de capitales ilícitos ha desequilibrado fuertemente los intercambios a escala mundial. Desde 1982 el boquete en los intercambios mundiales se estima en 100.000 millones de dólares anualmente. En 17 años ascendió a 7 billones de dólares.
Los poseedores de estos oscuros capitales son un revoltijo de servicios especiales, guerrillas del tercer mundo, mafias, traficantes de armas y estupefacientes, estados bajo embargo y bancos corruptos, incluidas compañías respetables y estados occidentales siempre listos para hablar del Derecho y predicar la moral. Esta importante masa financiera clandestina aprovecha las crisis coyunturales de la economía mundial –el crack de la bolsa de Nueva York de 1986, la quiebra inmobiliaria europea de principios de los noventa o la tormenta bursátil de los mercados asiáticos de 1997- para insinuarse en los engranajes de las finanzas internacionales. Esto crea el peligro de gangrenar a largo plazo la economía mundial, como lo demuestra el aumento del número de países con presupuestos aberrantes o la fuerza de los “países NEO”.

2) Países NEO (Net Errors and omisions)

Situados generalmente cerca de las zonas del narcotráfico mundial, se llama así a los países NEO porque disponen en su balanza de pagos de un epígrafe NEO (Net Errors and omisions) que gracias a una astucia contable permite, con el pretexto de errores estadísticos derivados de desórdenes administrativos, disimular la grave disfunción de su comercio exterior, que procede del tránsito del capital blanqueado.
El procedimiento del blanqueo debe su nombre a una técnica ideada por un mafioso de Chicago de los años 20 deseoso de librarse del dinero acumulado por la venta clandestina de alcohol en la época de la “ley seca”. En un arrebato de inspiración puso en práctica una idea sugerida por la mafia local comprando una cadena de lavanderías donde se paga en efectivo.
Lo único que tenía que hacer al final de cada jornada de trabajo era añadir dinero sucio a las ganancias del día y depositar todo ello en el banco, poniendo buen cuidado en declarar al fisco la totalidad del ingreso, incluyendo así el dinero blanqueado. Más tarde, en los años 50-60 las mafias, previendo las modificaciones del mercado del consumo, recurrieron a las cadenas de comida rápida como las pizzerias para blanquear el dinero sucio, dando así nacimiento a la “Pizza-conenection”. Estas técnicas a estas alturas parecen irrisorias.
La época del blanqueo de dinero en lavanderías y pizzerias hoy está relegada a la prehistoria del blanqueo.
Actualmente las sumas en cuestión son enormes y para su blanqueo requieren técnicas sofisticadas, lo que ha dado nacimiento a un nuevo oficio “el financiero-criminal”, es decir, un ingeniero financiero que despliega sus conocimientos en actividades de naturaleza criminal. El blanqueador recibe una comisión de aproximadamente el 8% de la suma que transita por las transferencias electrónicas, mientras que el contrabandista que cruza fronteras con maletines de dinero sólo obtiene el 5%. Por ejemplo las SWIFF (sociedades de telecomunicaciones financieras interbancarias mundiales) y las CHIPS (cámaras de compensación de los sistemas de pago interbancarios) manejan diariamente cerca de un billón de dólares.
La identificación, tanto del donante inicial como del beneficiario final, se vuelve más difícil en cuanto que el “reciclador”, mediante una comisión sustancial en cada fase de la operación, puede pasear el dinero de cuentas offshore a sociedades pantalla, hasta que encuentra un refugio decente al capital. Así un capital ilegal depositado en las islas Caimán puede, después de un rodeo por Hong Kong y Singapur, encontrarse en Luxemburgo para ser invertido a continuación en la inmobiliaria de lujo parisina. Aunque gana mucho, el reciclador está obligado a obtener resultados. Responde con su vida del éxito de la operación de blanqueo. En realidad responde con su vida… durante el resto de su vida.
Por evidentes e imperiosos motivos de seguridad, la mafia no puede tolerar a los amateurs o charlatanes y prefiere limitar sus riesgos al máximo. Cualquiera que participe en una operación de blanqueo se convierte en un rehén para toda la vida. Si se le permite, con permiso de sus patronos, reconvertirse a otras actividades, su puerto de anclaje sigue siendo su actividad inicial: La validación de un dinero de origen indecente. Cautivo dorado, pero cautivo. Además de la transferencia electrónica de capitales, que es la estrella del blanqueo, existen otras técnicas diversas vinculadas al juego, a las transacciones de metales preciosos, así como a la transferencia por “stroumpfage”:
El juego: El dinero negro se invierte en casinos con la compra de fichas de juego que luego se reconvierten en cheques, ésta es la técnica de las “fichas falsificadas”.
La compra de joyas y oro en zonas offshore: El producto de la reventa del metal precioso se deposita con toda legalidad en una cuenta del banco.
La transferencia por “stroumpfage”: Una multitud de pequeños contrabandistas de fronteras (smurfs en inglés estadounidense) compran en los bancos cheques de viaje o divisas. En Estados Unidos, cualquier persona puede retirar hasta 10.000 dólares en líquido. Una vez en el extranjero, los contrabandistas almacenan el efectivo o los cheques de viaje en una cuenta bancaria legal.
En 1993 en Nueva York el FBI, intrigado por un flujo anormal de envíos desde la oficina local de correos, ordenó una investigación. El descubrimiento fue impresionante: los cárteles colombianos, recurriendo a “hormigas” (2) procedieron, durante casi un año, a hacer transferencias a cuentas ubicadas en Panamá por un importe global diario del orden de 100.000 dólares realizado por medio de modestos envíos cuyo valor para cada operación no excedía de 1.000 dólares.
Desde Panamá los fondos recogidos se reenviaban a una sucursal bancaria de Hong Kong. La operación permitió el blanqueo de 198 millones de dólares en menos de un año. La distribución de los fondos entre los distintos mafiosos beneficiarios se hacía gracias los signos distintivos registrados en el dorso del giro postal que permitían la localización de cada envío y su pertenencia.
Otra estratagema de legalización del dinero ilícito: La creación de una sociedad pantalla cuyo objeto es recoger fondos y “donativos de caridad” para falsas congregaciones religiosas.
Frente a tanta “pasta” la imaginación se pone al máximo rendimiento y los métodos a veces son rocambolescos, como los utilizados por un traficante de cannabis paquistaní que no vaciló en ocultar 35 millones de dólares en efectivo en máquinas de desalación de agua de mar, especialmente preparadas para el contrabando, encargadas en Australia para exportarlas a Singapur.
No obstante, ante la enormidad de las sumas en juego, la mafia no dudó a veces en tomar el control total de un banco para convertirlo en una fábrica de blanqueo de dinero.
El inventor del “banco pirata” es José Antonio Fernández, gran importador de marihuana colombiana a Estados Unidos en los años setenta. A través de toda una serie de sociedades pantalla, Fernández consiguió tomar el control de la “Sunshine State Bank” de Florida, transformándola en una blanqueadora gigante durante una decena de años, hasta que lo detuvieron en 1984.
Entre otros ejemplos famosos de banco pirata se puede citar el del BCCI (Banco de crédito y Comercio Internacional), propiedad de los emiratos árabes, que quebró a finales de los años 80 por su conexión, real o supuesta, con el dinero de la droga.
Otro ejemplo es el del “Great American Bank” en Estados Unidos bajo control colombiano en 1984, momento de su desmantelamiento, así como el “Banco para el desarrollo de de Poznam” (Polonia), que transfirió a Alemania en 1992 cerca de 150 millones de dólares resultantes de los fondos errantes de Hong Kong.
El proceso del blanqueo se desarrolla en tres etapas: Colocación, recopilación e integración
Colocación (o prelavado): La operación consiste en colocar las importantes cantidades de dinero conseguidas de manera ilegal en el eslabón más simple de la cadena: la economía al por menor (compra de divisas por agentes de cambio, casinos, geriátricos) y transferencias de modestas remesas de pequeños contrabandistas (schtroumpfage).
Recopilación (o lavado): Esta operación consiste en borrar cualquier rastro de los orígenes criminales del dinero multiplicando las transferencias de cuenta a cuenta o las transacciones financieras, en particular por medio del “préstamo simulado”. Este procedimiento consiste en obtener un préstamo para una inversión garantizado por el importe de la cuenta numerada establecida en el mismo banco por el prestatario. El importe del préstamo corresponde al del depósito y los intereses a pagar idénticos a los percibidos sobre la cuenta numerada.
Integración (o reciclaje): Es el último paso, que confiere una apariencia de legalidad a las rentas de origen criminal que se invierten en circuitos económicos oficiales: inmobiliarias, turismo, finanzas. Así el capital ilícito sale de Nueva York a través de pequeños portadores, en primer lugar hace un alto en uno de los paraísos fiscales de los microestados de la región Pacífico-Caribe, se transfiere a los grandes centros financieros asiáticos para emprender un principio de respetabilidad, (Hong Kong, Singapur) y termina en los grandes centros financieros occidentales (Suiza, Luxemburgo).
En esta fase el poseedor del capital reclama en París o Londres un “préstamo adosado” (Loan back), es decir, un préstamo garantizado por un depósito bancario en Luxemburgo, invirtiendo así de forma totalmente legal en bienes inmuebles, hostelería, restauración, Bolsa, etcétera y añadiendo un plus de honorabilidad y existencia en el mundo.
Ante la amplitud del fenómeno los siete países más industrializados, el G7, fundó en julio de 1989, fecha del aniversario de la Revolución Francesa, el “Grupo de acción financiera internacional” (GAFI) contra el blanqueo de capitales. Instrumento de estudio y peritaje, el GAFI se encarga de seguir la evolución de las técnicas de reciclaje del dinero sucio y comprobar la aplicación de las medidas de lucha contra el blanqueo. En 2005, el “Tracfin” organismo encargado de perseguir las cuentas dudosas, estudió más de diez mil “declaraciones sospechosas” señaladas como dudosas, pero sólo se trasladaron 347 expedientes a la justicia.
Entre los otros organismos internacionales destacan el “Programa de las Naciones Unidas para el control internacional de la droga” (PNUCID), el “Órgano internacional de control de los estupefacientes” (OICS) y finalmente la Interpol, que dispone de un servicio especializado de lucha contra el blanqueo del dinero de la droga. Aunque la comunidad internacional ha tomado conciencia de la amplitud del delito, la lucha contra la proliferación de capitales ilícitos sigue siendo rudimentaria.
Según el Gafi, apenas se confiscó el 0,5% de los 4,4 billones de dólares de beneficios conseguidos entre 1982 y 1992 por el tráfico de drogas. El mal es profundo y la contaminación amplia.
Una treintena de países aparecen contaminados por los narcodólares, de ellos trece en América Latina (Argentina, Brasil, Bolivia, Colombia, Ecuador, Guatemala, Haití, México, Panamá, Paraguay, Perú, El Salvador y Venezuela), cuatro en Asia (Birmania, Pakistán, Tailandia y Camboya), ocho en el antiguo bloque soviético (Polonia, Bulgaria, Rusia y las Repúblicas musulmanas de Asia Central), tres en Oriente Medio (Turquía, Siria, Líbano) y dos en África (Nigeria y Guinea).
Los países occidentales también están contaminados por el dinero sucio, a la cabeza, naturalmente, Estados Unidos, dividido desde el tiempo de la prohibición en los años 20, entre grandes familias mafiosas. En Italia, cuna de la mafia, se desencadenó una gran operación de lucha contra la corrupción, bautizada como “Manos limpias”, que hizo tambalear los fundamentos de la República; la comisión parlamentaria antimafia consideró que los narcodólares representaban el 15% de las sumas colocadas en la Bolsa de Italia, mientras que en Alemania, la “Pizza connection” habría permitido blanquear entre 2 y 5.000 millones de dólares.
En Francia, un escandaloso informe del Centro de Análisis y Prevención del ministerio de Asuntos Exteriores implica a empresas petroleras y a militares franceses en el tráfico. “El África subsahariana francófona sigue siendo una puerta de entrada al sistema financiero internacional. Las compañías petroleras participan en la opacidad del negocio del oro y son partes involucradas en el proyecto de zona franca de Sao-Tomé, que según todos los indicios será un eslabón importante en la criminalización de los intercambios comerciales y financieros. El ejército está implicado en el consumo o tráfico de estupefacientes (el Chad, Yibuti) y en el fraude del diamante (República Centroafricana)”, decía un informe del 29 de junio de 1995 y cuyos extractos se han publicado en el semanario satírico “Le Canard Enchaîné”.
De los 57 paraísos fiscales o aberrantes países NEO contabilizados en el mundo, 38 enclaves presentan la característica singular de no disponer, o no tener que facilitar los datos calculados sobre sus depósitos bancarios extranjeros. Entre estos enclaves están Aruba, antigua dependencia neerlandesa del Caribe hasta 1996, y la isla malasia de Labuan en el Pacífico, que alberga 21 bancos y 11 “trust companies”.
En Europa el Principado de Liechtenstein, puerto de 40.000 compañías offshore, tampoco dispone de datos sobre depósitos bancarios extranjeros. A este respecto es objeto de una atención calificada de “prioridad elevada” por la Oficina de Narcóticos del Departamento de Estado de EEUU.
Chipre, por su parte, desde el hundimiento del antiguo bloque soviético pasó a ser un puerto del capital ruso, seguramente debido a las afinidades socioculturales entre estos dos países ortodoxos. En un expediente especial dedicado a las “Mafias del Mundo”, el semanario francés l'Express indica que el Banco Central de Nicosia autorizó, en 1992, la creación de 2.892 sociedades offshore, de las que el 53,5% pertenece a hombres de negocios de Europa del Este, con lo que quintuplicó en un año el número de estas sociedades de régimen fiscal especial. Más de 10.000 rusos consideran la parte griega de la isla como su segunda patria y han llenado la villa portuaria de Limassol de restaurantes rusos e incluso han asegurado la edición de dos periódicos en lengua rusa.
Uno de los últimos paraísos fiscales surgido, que además pretende ser el más potente, es Las Seychelles. El gobierno de esta isla del océano Índico adoptó, en noviembre de 1995, el “Seychelles economic development act”, que concede la inmunidad a los inversores extranjeros contra toda persecución criminal y una protección total contra cualquier medida de decomiso de sus bienes, a menos que los actos de violencia o el tráfico de drogas se hayan cometido en el territorio de Seychelles. El importe inicial de la inversión que permitía beneficiarse de tal protección se fijó en 10 millones de dólares.
Nauru: Este estado de la Micronesia (Pacífico), de 21 km2 para diez mil habitantes, es la república más pequeña del mundo. 400 bancos y sociedades offshore están registrados en una sola empresa, la NAC (Nauru Agency Corporation) por donde, según el banco central de Rusia, transitaron en 1999 más 80.000 millones de dólares.

3) La nebulosa de la mafia

“Mafiosos de todos los países, uníos”, podría ser la consigna de las organizaciones criminales transnacionales (OCT) desde la caída del comunismo en 1990 y la universalización de la economía de mercado, lo que acarreó como consecuencia el progreso de la cooperación intermafiosa a los dos lados del telón de acero y un zafarrancho de combate en los grandes servicios occidentales, FBI, Scotland Yard y el BKA (policía criminal federal alemana con la sede en Wiesbaden) destinados a combatir esta nueva “internacional del crimen”.
La primera cumbre inter-mafia Este-Oeste se celebró apenas un año después del hundimiento del bloque soviético, en marzo de 1991 en Varsovia, entre representantes de la “Cosa Nostra” (mafia italoamericana) y los dirigentes de los grupos criminales de la antigua Unión Soviética. La segunda fue en 1992 en Praga.
Empresas de envergadura planetaria, que disponen de medios superiores a muchos estados del tercer mundo, las mafias son sociedades criminales de reclutamiento iniciático concebidas para ser prácticamente indestructibles. Manejan decenas de miles de millones de dólares al año y amenazan gravemente los flujos financieros legales. Raymond Kendall, secretario general de la Interpol, admitió en abril de 1994 que en el fichero de 250.000 grandes malhechores administrado por este organismo, 200.000 estaban vinculados al narcotráfico.
Ocho grandes confederaciones mafiosas u organizaciones criminales transnacionales (OCT) extienden sus tentáculos sobre el conjunto del planeta y no descuidan ningún sector de actividad.
Desde el principio de la década de 1990 la mafia internacional, preocupada por diversificar sus actividades, invirtió en masa en Europa del Este rescatando hoteles de lujo y empresas privatizadas. En contrapartida la mafia rusa se lanzó a la conquista del Oeste, en una especie de división internacional del trabajo criminal. Con el lanzamiento de un puente hacia Japón vía la isla de Hokkaido y hacia los enclaves de Hong Kong y Macao, firmemente establecida en Alemania, especialmente en Hamburgo y Frankfurt, desde entonces le pisa los talones a la mafia italoamericana de Brooklyn (EEUU).
De los 200.000 inmigrantes rusos que llegaron a Estados Unidos desde los años 70, más de 50.000 se establecieron en Brooklyn. Entre ellos, según los cálculos del FBI, cerca de 2.000 trabajan regularmente para las 29 bandas que operan en el barrio. Desde 1995 el FBI investiga, por otra parte, 35 “asuntos” relativos a los rusos en el territorio estadounidense.
1) Estados Unidos: Emanadas de la Cosa Nostra italiana, 25 familias mafiosas se reparten el territorio estadounidense con sólidos anclajes en Chicago, Nueva Inglaterra, Florida y las ciudades de juego Las Vegas y Atlantic City. Cinco familias se reparten Nueva York desde 1931, la más poderosa es la familia de los Genoveses seguida por Gambino, Colombo, Lucchese y Bonano. La mafia italoamericana de Estados Unidos está especializada en el tráfico de estupefacientes, chantaje a sectores industriales como el del tratamiento de basuras de Nueva York, juego ilegal, pirateo de licitaciones, préstamos a tipos de usura, etcétera.
2) Rusia: Un centenar de formaciones permanentes que agrupan cerca de 200.000 combatientes repartidos en 150 regimientos dirigidos por setecientos jefes y cuadros, disponen de importantes conexiones internacionales especialmente en Alemania y en los países del antiguo bloque soviético. El grupo del Cáucaso -armenios, azeríes, daguestaníes, georgianos y chechenos- está considerado generalmente como uno de los más eficaces, en particular en el mercado negro, saqueo de los depósitos de estado, tráfico de armas (Cáucaso, antigua Yugoslavia, Argelia) y tráfico de estupefacientes.
3) Japón: 60.000 yakuzas, miembros de una organización mafiosa se inician en 3.500 clanes agrupados en grandes confederaciones criminales. Las más importantes son Yamaguchi Gumi, Inagawa Kai y Sumiyoshi Kai, que agrupan dos tercios de los clanes. Firmemente implantada en Corea del Sur, Australia y Estados Unidos, especialmente en Hawai, en la costa occidental de Estados Unidos, la mafia japonesa actúa en el ámbito del tráfico de anfetaminas, extorsión de empresas, pirateo de los mercados públicos, contrabando de armas y juego ilegal.
4) México: Seis grandes cárteles (Culiacan, Guadalajara, Juárez, Matamoros, Sonora y Tijuana) declaran un centenar de bandas criminales que explotan los 3.200 kilómetros de frontera con Estados Unidos. Bien instalados en el aparato administrativo político mexicano, los cárteles de este país son especialistas en la trata masiva de emigrantes chinos clandestinos en conexión con las tríadas, así como en el tráfico hacia Estados Unidos de estupefacientes de producción local (marihuana) o importados de Colombia (cocaína).
5) Colombia: Dos grandes cárteles (Medellín y Cali, articulados en una organización piramidal que incluye mil directivos respaldados por 25.000 grupos criminales de base, controlan el 75% de la producción mundial de cocaína, con ramificaciones en todos los segmentos de producción y en cada etapa de comercialización: con grupos especializados en la agricultura, química, transporte intercontinental y venta al por mayor, el cártel asegura en la cumbre la coordinación, transmisión de la información y protección general del conjunto.
6) Italia: La mafia italiana cuenta con cuatro grandes confederaciones mafiosas que disponen globalmente de unos 110.000 miembros que garantizan su presencia en 42 países. La distribución de las zonas de implantación se establece del siguiente modo: La Cosa Nostra, en Sicilia, dispone de 40.000 a 50.000 personas reunidas en torno a 130 familias reclutadas según criterios biológicos; la Camorra, en la región de Nápoles, cuenta con 110 familias y cerca de 10.000 miembros; Ndragheta (Calabria) 150 familias, 5.500 cuadros y reclutas; y finalmente la Sacra Corona Unita (Apulia) con 32 familias y 2.500 miembros.
7) Turquía: Una decena de grandes clanes kurdo-turcos (Ayanoglou, Baybasin, Cakili, Heybeti, Karaduman, Ulucan) dirigidos por poderosos padrinos y que se benefician de sólidos apoyos políticos, suministran un intenso tráfico de heroína entre Asia Central y Europa. Presentándose como armadores, herederos de la actividad de contrabando floreciente bajo el Imperio Otomano, la mafia turca está sólidamente implantada en Europa (Alemania, España, Países Bajos y Suiza). Sus actividades principales son el contrabando de material electrónico y vídeo, falsificación de documentos oficiales, piratería de mercados públicos, prostitución y extorsión.
8) Los chinos y sus famosas seis grandes tríadas constituyen sin ninguna duda la primera organización criminal del mundo con más de 100.000 iniciados. Tienen establecidas tres tríadas en Hong Kong (Sun Yee On, 14 K y Federación WO), dos en Taiwán (Bambú Unido y Banda de los 4 mares) y una en China (El Gran círculo).
Sun Yee On, que se fundó en 1919 en Cantón, es la primera banda del mundo y cuenta con 60.000 miembros. Fundada en 1947, también en Cantón, para apoyar al Kuomintang (Partido nacionalista chino, N. de T.) replegado en 1949 en Hong Kong ante el avance comunista, 14 K cuenta con 24.000 miembros.
La Federación WO, creada en 1908, dispone de 29.000 miembros divididos en 10 clanes y reina en el oeste de Hong Kong. Bambú Unido, en Taiwán, cuenta con 20.000 miembros distribuidos en 13 clanes y se fundó en 1956 por un grupo de criminales expulsados de Hong Kong, mientras que la Banda de los 4 Mares sólo agrupa a 5.000 miembros. El Gran Círculo se fundó en China por antiguos guardias rojos; no se sabe de cuanto personal dispone ni la fecha de su fundación. Tráfico de estupefacientes y armas, tráfico de emigrantes clandestinos chinos, vehículos robados, piratería de audio y vídeo, juego ilegal, extorsión, usura, prostitución y pornografía constituyen la gama de sus actividades que se extienden al conjunto de la zona Asia-Pacífico además de Australia, con sólidas redes en América del Norte e infiltraciones en Europa.

4) - El Hit parade de los paraísos fiscales

Las zonas francas y paraísos fiscales constituyen poderosos lugares de tráfico, transformación y redistribución de las riquezas. Basándose esencialmente en la “derogación”, una liberalización de las dificultades destinada a impulsar la economía mundial, constituyen por excelencia el “antimundo”, es decir, espacios si no fuera de la ley, al menos fuera de la ley común, la otra cara del sistema pero parte integrante del engranaje mundial.
Estos centros financieros offshore disfrutan de escasa fiscalidad, secreto bancario absoluto, conservación del anonimato de los propietarios de las sociedades y una cooperación fiscal y judicial reducida, o incluso casi inexistente, con los demás países.
Cerca de cinco billones de dólares, o sea la mitad de los activos financieros transfronterizos, estarían ubicados en estos centros offshore que constituyen verdaderos “agujeros negros” de las finanzas internacionales y cuyo papel fue muy importante en la aceleración de la crisis asiática en 1997 y un año más tarde en la transmisión de la crisis rusa a América Latina. Con el fin de mejorar la “rastreabilidad” de los flujos financieros y evitar el contagio de las crisis, desde 1999 el “Foro de estabilidad financiera”, emanación del G7 que agrupa a los países más industrializados, junto con el Banco de Reglamentos Internacionales, en Basilea, se encarga de vigilar estos paraísos.
La distribución de los paraísos fiscales no es nada aleatoria. La mayoría están situados en un gran cinturón que rodea el mundo desde Centroamérica y el Caribe pasando por el Mediterráneo, el Oriente Medio y el sur y suroeste de Asia, es decir, las principales vías marítimas de los tráficos y estrategias mundiales, en el punto de unión de los océanos y los continentes.
Los otros grandes conjuntos están situados cerca de los “centros” que controlan y se disputan esas vías de paso, por ejemplo Tánger para la zona Europa-Mediterráneo y el estrecho de Gibraltar, Guernsey y la Isla de Man para el canal de la Mancha y el océano Atlántico.
La existencia de paraísos fiscales es en cierto modo una incitación al “incivismo” en la medida en que la propia idea que presidió su creación es la finalidad de librar a los poseedores de capitales de las dificultades, controles y exacciones del país de origen.
Uno de los aspectos más llamativos de los paraísos fiscales es sin duda el registro offshore de los buques –“pavillon de complaisance” (cuando un barco está registrado en un país diferente al de su dueño por razones de conveniencia, N. de T.)- o empresas. Así, Liberia detenta la primera flota del mundo y la región Pacífico-Caribe ofrece el espectáculo de un inmenso aparcamiento para cerca 90.000 sociedades offshore. Pero la palma se la lleva Hong Kong, antiguo enclave británico y nuevo pulmón económico de China.
Hong Kong devuelta a China desde julio de 1997, se coloca en la cabeza de la clasificación en la importancia de los depósitos bancarios extranjeros (427.700 millones de dólares) recogidos por 500 bancos extranjeros.
Las Islas Caimán, territorio caribeño bajo dependencia británica, llegan a la segunda posición con depósitos de aproximadamente 388.600 millones de dólares en 544 bancos, 70 fondos financieros y 30.000 compañías offshore.
Luxemburgo, principado de Europa, se sitúa en tercera posición con depósitos de 360.400 millones de dólares en 221 bancos y 1.800 fondos financieros.
Suiza está en la cuarta posición con depósitos de 330.200 millones de dólares en 600 bancos particulares. A la defensiva desde el asunto del oro nazi y las “herencias vacantes” (cuando el estado se arroga los bienes de las personas que mueren sin herederos o éstos no pueden demostrar legalmente su condición de tales, N. de T.) judías, Suiza sigue siendo intransigente en cuanto al secreto bancario, base de la prosperidad helvética. Sin embargo dio prueba de flexibilidad con la firma, en 1997, de un tratado de ayuda judicial mutua con Estados Unidos. Además en 1998 instituyó una ley sobre el blanqueo que obliga a los bancos suizos a señalar cualquier acción sospechosa y un convenio de vigilancia que obliga a las entidades a verificar la identidad de sus clientes. Según un estudio de la universidad de Basilea, los bancos suizos administran alrededor del 35% de los activos privados mundiales, la plaza financiera genera más de cien mil empleos y garantiza cerca del 11% del producto interior bruto de la Confederación. (Le Monde, 23 de agosto de 2000).
Singapur (Asia), en quinta posición, con 119 sucursales de bancos internacionales y 76 bancos de inversión, y
Las Bahamas, en la sexta posición con 172.000 millones de dólares, 404 bancos con 180 sucursales y 16.200 compañías offshore.
Las cinco estrellas del hit parade (Hong Kong, Islas Caimán, Luxemburgo, Suiza y Singapur) son objeto por parte de la justicia estadounidense de una “alta prioridad” en la vigilancia de sus actividades, mientras que la sexta, Las Bahamas, goza de una atención “media”.
La región del Caribe es un puerto para capitales errantes, entre los entresijos de los microestados de la zona se desliza una proliferación cancerosa en los intersticios de las grandes potencias.
Tres de las microposesiones inglesas del Pacífico albergan ellas solas 59.200 compañías offshore, 16 bancos y 182 filiales de sociedades aseguradoras: Anguilla (4.200 compañías offshore), Barbados (16 bancos y 182 filiales aseguradoras), las Islas Vírgenes británicas (55.000 compañías offshore). En cuanto a la república más pequeña del mundo, Nauru (estado de Micronesia en el pacífico, de 21 km2 para diez mil habitantes), tiene registrados 400 bancos y sociedades offshore en una sola empresa, NAC (Nauru Agency Corporation) por donde, según el banco central de Rusia, circularon en 1999 más de 80.000 millones de dólares, el mayor rendimiento mundial por metro cuadrado.
Curiosamente presentan la doble particularidad de figurar en la lista de estados DND (donantes no disponibles, N. de T.), es decir estados que no disponen de indicaciones -o no están obligados a darlas- del importe de los depósitos bancarios de origen extranjero, y de gozar al mismo tiempo de una prioridad “débil” por parte de la administración estadounidense.
La delicadeza estadounidense podría explicarse por el hecho que estas islas caribeñas están bajo la dependencia de sus aliados ingleses. El mismo régimen se aplica a las posesiones insulares inglesas de la zona Europa-Atlántico donde se da una situación similar: Guernesey (75 bancos offshore y 248 fondos financieros), Las Bermudas (400 fondos financieros y 1.300 filiales aseguradoras) y Jersey (150 trusts y 292 fondos financieros), figuran en el epígrafe DND y en la calificación "débil" en materia de prioridad estadounidense.
Por el contrario Panamá, que ostenta el récord mundial absoluto de las compañías offshore (300.000 domiciliadas en su territorio, además de 106 bancos), es objeto de una atención "prioritaria" de la administración de EEUU, sin duda debido a la presencia del Canal de Panamá y de su proximidad al territorio estadounidense.
En este principio de siglo que marca el comienzo de un nuevo ciclo histórico, el planeta no parece tan paradisíaco como pretende sugerir la proliferación de los paraísos fiscales y el nuevo orden mundial es más bien el desorden en el plano internacional.

Notas:
(1)
http://es.wikipedia.org/wiki/Offshore
(2) Las “hormigas”
El término inicial completo es “hormigas japonesas” porque el método de blanquear dinero a través de pequeñas cantidades transportadas por muchas personas se creó en Japón. Es el ejemplo más claro de un circuito que abarca las tres fases del blanqueo: La colocación consiste en que el blanqueador entrega a falsos turistas (las hormigas) una cantidad de dinero negro que suele oscilar entre 3.000 y 4.000 euros a cada uno, así como unos billetes de avión para París, por ejemplo. Las hormigas compran en este destino productos de lujo como joyas, perfumes, bolsos, etc. en las boutiques de los Campos Elíseos, siendo ésta la fase de integración. A continuación, las hormigas vuelven al país de origen y entregan estos productos recibiendo a cambio una comisión. Dichos objetos se ponen a la venta en tiendas de lujo pertenecientes al blanqueador como artículos importados de París, integrando así las ganancias de la venta en la economía legal.
Texto original en francés:
http://www.tlaxcala.es/pp.asp?reference=3281&lg=fr
René Naba es un periodista francés de origen libanés.Antiguo responsable del mundo arabo-musulmán en el servicio diplomático de la Agencia France Presse; antiguo consejero del Director General de RMC/Moyen-Orient, encargado de la información.Su próximo libro, en preparación, se titula Il était une fois la dépêche d’agence, Editions l’Armoise- 8, Rue des Lions Saint-Paul, 75004 Paris, septiembre de 2007.
Es autor de las siguientes obras:Aux origines de la tragédie arabe, Éditions Bachari 2006. Du bougnoule au sauvageon, voyage dans l’imaginaire français, L’Harmattan 2002. Rafic Hariri, un homme d’affaires, Premier ministre, L’ Harmattan 2000. Guerre des ondes, guerre de religion, la bataille hertzienne dans le ciel méditerranéen, L’Harmattan 1998.